martes, 20 de octubre de 2015

Pre-nostalgia

Tengo una concepción nostálgica hacia lo desconocido. Me pregunto, por qué y de qué memoria se alimenta esto.
Cómo puedo añorar la mano que jamás me tendiste, el beso que no me robaste, las calles que nunca caminamos.
Las horas, tanto cómo si alguna vez hubieses ocupado alguna con tu presencia.
Paso tiempo rememorando un pasado inexistente, un ayer qué no se sitúa en ningún calendario, y sin embargo, repercute en el hoy aunque no tenga calibradas tus caricias en mi pelo, ni el tono de tu hablar en susurros.
Como si me hubieran mutilado parte de una historia jamás contada, como si me hubieran arrebatado las hojas del libro que nunca se escribió.
Tengo un otoño desparramado por frágiles suposiciones, un otoño sin raíces. Algo como la absurda melancolía de un nene rememorando la vejez. 
Pero siento sobre todo el sinsabor de andar padeciendo, como un loco, el dolor aquel que nunca punzó. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario