miércoles, 26 de enero de 2011

Des-inventario

Hoy ando arrancando;
Artículos,
molde, tejido, piel, ángulo, esquina,
relleno, artificial, color,
aparato, simbiosis, esquema,
intruso.
Guerra y tregua.
Contrapeso, esfuma, manos, fuerza,
Infinito.
Charco, gotas, venas,
acumulo un estanque.
Alfabeto, cimientos, boca, azar, injusticia,
(Vos) y paréntesis.
Niños, ojos, perros, pan,
tijeras.
Esperar, espejos, malabares.
Una conquista histérica.
ceguera, andamio, suerte,
impulso, horror, búsqueda.
Sangrar hondo y lamernos las heridas.
Escamarme las uñas de tanto
arrancar,
dónde las palabras son como semillas.
No me salva un principio de mes,
no me conmueve un fondo plástico.
Dogma, idilio, anzuelo,
debajo y detrás
No hay nada.

miércoles, 19 de enero de 2011

Inocencia Interrumpida

Hoy al mediodía en algún noticiero pasaron un vídeo sobre un concurso de belleza con formato de reallity, donde las participantes tienen un rango de edad entre 4 y 8 años. Me pareció un poco pronto que algunas madres sometan a sus hijas a ese nivel de exposición, y a una competencia de belleza que está inspirada en prototipos de mujeres, no de nenas.
Me impactó ver como una de estas nenas lloraba cuando le depilaban las cejas con cera, mientras la imbécil de la madre la forzaba, bajo el consuelo de "así vas a ser la más linda", dejando en claro que es una madre frustrada que proyecta su deseo de ser reconocida por su belleza en su hija.
También las broncean, las suben a tacos altos, les colocan fundas en los dientes, entre otras frivolidades que a esa edad no deberían interferir, ya que demasiado van a padecer cuando crezcan, en una sociedad como la que conformamos hoy en día.
No entiendo porque esas madres las someten a ese nivel de exposición y siendo tan chicas las adentran a un mundo cruel y competitivo, que solo va a inculcarle valores negativos (Todos convivimos con valores negativos, la diferencia es que tenemos la suficiente edad, experiencia y educación para poder distinguir, elegir y asimilar lo que nos enriquezca o tengamos ganas) Por lo tanto se están nutriendo de cosas que nada que tienen que ver con la infancia, como la obsesión de ser perfectas a cualquier precio, la enemistad, la cosificación.
Me resulta muy triste que se olviden de la felicidad de sus hijas, y hagan de eso un negocio.
Solo escribo esto porque estoy indignada.

martes, 11 de enero de 2011

Señora María Elena

Crecí con los libros de cuentos y algunos cassettes con canciones de María Elena Walsh. Eran únicos. Como olvidarme de clásicos como: Canción para tomar el té, El brujito de Glulubú, El reino del revés, La mona Jacinta, La reina batata, Manuelita, Twist del mono liso y muchos mas hits de mi infancia, que de tanto haber bailado y cantado se grabaron en mi memoria, de manera tal que hoy puedo cantarlos como si no hubiera pasado el tiempo (aunque ya no puedo bailarlos con la misma gracia, claro está) 
Ella tenía esa magia para transmitir miles de sensaciones a través de la escritura, y esa sensibilidad única para con los chicos, que va a lograr que transcienda generaciones y siga presente mediante su obra. No tengo dudas de que cada uno de nosotros la va a recordar con el cariño que se merece. 
El siguiente es uno de los poemas para un público mayor, porque si lo más difícil es escribir para niños, imaginen que debe tener en su haber varios escritos para nosotros, la gente adulta. En cualquiera de mis edades, adoro a esta señora. 

El viaje
Sólo quiero tu casa de ternura,
vivir en su calor.
Eres el mar y la orilla segura
porque el único viaje es el amor.
Reconocer tu alma, qué aventura
de mágico sabor.
Allí tendré profundidad y altura
porque el único viaje es el amor.
Besos desconocidos como puertos
esperan bajo un cielo de mirada.
-Lo demás es dolor.
Hoy vuelvo de países que están muertos,
después de un mar que no me dijo nada,
porque el único viaje es el amor.